Así son los nuevos 'súper ricos'
La crisis y posterior recesión han ahondado la brecha entre ricos y pobres, pero esto no es consecuencia sólo de la pérdida de poder adquisitivo de las clases media y baja, sino también por el aumento de las fortunas de los más adinerados. El resultado, una nueva élite de 'mega ricos' de estatus inalcanzable y que vive muy alejada de la realidad.
Así los describe la escritora Chrystia Freeland, autora del libro Plutócratas. Según indica a la BBC, forman "una comunidad transglobal de pares que tienen más en común entre ellos que con sus conciudadanos. Son una nación en sí misma".
El perfil del 'mega rico'
Los vínculos que les unen son, en su opinión, el origen de su riqueza, ya que en muchos casos se trata de "adictos al trabajo", que se consideran "ganadores" en un entorno global altamente competitivo y que nada tienen que ver con "los caballeros ociosos que heredaron sus fortunas" del pasado.Esta nueva clase de multimillonarios está formada por miembros de muy diverso origen: oligarcas rusos, jeques del Golfo Pérsico, petroleros texanos, pioneros de Internet y las nuevas tecnologías, condes italianos o magnates indios de Bollywood. Su residencia principal está en Nueva York, Londres, Hong Kong o Bombay, pero entre todos componen una comunidad independiente a la que el autor estadounidense Robert Frank denomina"Richistán".
Freeland explica a la BBC que este fenómeno fue muy significativo en Estados Unidos entre 2002 y 2007, cuando el 65% de todo el crecimiento de los ingresos correspondió al 1% de la población. Pero el rápido aumento de la riqueza de unos pocos se produce en países como Reino Unido, Canadá, Alemania, Rusia o China.
El dilema
Para la escritora, el auge de los "uberricos" presenta un dilema. Tienden a aislarse y a relacionarse entre ellos, y su existencia puede causar frustación, malestar y hasta rechazo entre clases más bajas, pero "en la economía global competitiva de hoy, necesitamos más que nunca a los 'súper ricos' y las compañías innovadoras que ellos han creado", señala. Además, "ellos nos necesitan a nosotros también, como consumidores, como empleados, como conciudadanos", afirma.Por eso, cree que sólo cabe una solución posible para la supervivencia de estas élites. "Hay una lección que nos enseña la historia. A largo plazo sólo pueden sobrevivir de dos maneras: suprimiendo la disidencia o compartiendo la riqueza".
En opinión de algunos expertos, como el antiguo presidente de la Fed Alan Greenspan, en la actualidad el mundo se asienta sobre una economía "muy distorsionada". Para el economista y analista de MarketWatch, Paul Farrell, el desequilibrio es tal que desembocará en una revuelta social. "Están atrapados en la burbuja de los 400 de Forbes, en una habitación insonorizada que los aísla. Ven a la gente como trabajadores sin cara, clientes o contribuyentes", afirmaba Farrell en un artículo reciente, en el que proponía como solución al problema una subida de impuestos.
Para la subdirectora del grupo independiente de análisis Demos, Julia Margot, la situación empeora con la sobre exposición de estas personas en los medios de comunicación. "Deberíamos preocuparnos", concluye.
FUENTE : El Economista.es
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