Obama se vuelca en la economía para hacer campaña electoral

La exposición de Obama a los medios supone un cambio de tendencia respecto a los meses anteriores, en los que la recuperación empezó a debilitarse (el PIB creció un 1,6% en el último trimestre, menos de lo esperado) y hasta la Reserva Federal pidió ayuda al Gobierno porque ella sola no puede solucionar todos los problemas.

El cambio de actitud de la Casa Blanca se produce, además, en un momento peligroso para el presidente, cuyo partido, los demócratas, tiene ante sí una dura reválida electoral. El próximo noviembre los comicios legislativos renovarán el Congreso y el Senado y Obama puede perder la amplia mayoría que tiene hoy si se cumplen los sondeos. Este proceso electoral, a su vez, puede paralizar la sesión parlamentaria, en un momento en que el Gobierno está intentando sacar adelante su agenda para estimular la economía. Los congresistas demócratas temen que cualquier decisión de Obama afecte a sus escaños y los republicanos, en la oposición, quieren sacar el máximo rendimiento a la débil coyuntura económica.

Culpas

"Es comprensible" que los ciudadanos "me culpen a mí", aseguró el demócrata, porque "soy el presidente y porque controlamos el Congreso y el Senado". Obama reiteró que la recuperación está siendo "dolorosamente lenta" y lamentó que este escenario coincida con la "temporada electoral. Cada candidato tiene su propio distrito, su propio plan de maquillaje, su propio mensaje. Así es como funciona la política".

El presidente, que pronosticó que los demócratas tendrán un buen resultado en las urnas, admitió su "frustración" por la coyuntura. Además, avanzó que "de aquí a noviembre, voy a recordar que nuestras políticas son las que ponen a la economía en la dirección correcta".

El sucesor de George W. Bush, cuya popularidad continúa a la baja, ha decidido suspender las rebajas fiscales a las rentas altas decretadas por el Gobierno anterior para poder recaudar 700.000 millones de dólares (549.780 millones de euros) en diez años . Estos descuentos, por el contrario, se mantendrán para las clases medias. Además, Obama pretende aprobar un plan de inversiones en infraestructuras públicas y aumentar las desgravaciones fiscales a las empresas.

Estas medidas, sin embargo, requieren aprobación parlamentaria, salvo que el demócrata firme una orden presidencial, posibilidad que Obama se niega a confirmar.

Las políticas desveladas en las últimas semanas pueden llegar a costar 180.000 millones, equivalentes al 1,28% del PIB.

"Todo lo que hacemos está destinado a intentar estimular el crecimiento y la creación de empleo. A ello se reserva la totalidad de nuestra agenda", indicó el presidente, que añadió que "necesitamos poner el foco en una amplia base" de propuestas para crear empleo. La tasa de paro está hoy en el 9,6%.

Relevos

De momento, la Casa Blanca ya ha reordenado parte del equipo económico del presidente. Ayer, la Administración anunció que uno de los colaboradores de Obama en su campaña presidencial, el académico Austan Goolsbee, asumirá la presidencia del Consejo de Asesores Económicos del presidente. Goolsbee sustituye a Christina Romer. Además, la profesora de Harvard Elizabeth Warren se perfila como la responsable de la agencia de protección financiera del consumidor.

El apoyo de un disidente

Una de las primeras medidas que la Casa Blanca quiere ejecutar es un plan de financiación para las pequeñas empresas. La propuesta, en tramitación, está bloqueada en el Senado, por la oposición de los republicanos. Sin embargo, ayer, George Voinovich, senador conservador que se retirará al término de la actual legislatura, anunció que romperá con su partido y que respaldará la propuesta de Barack Obama. La iniciativa supondrá que la Administración invierta 30.000 millones de dólares en bancos comunitarios, siempre que éstos financien a pequeños negocios.

Desaceleración

1. El PIB de EEUU avanzó un 1,6% anualizado en el segundo trimestre, algo que reduce las expectativas de crecimiento a nivel mundial.

2. En el primer trimestre el ritmo de crecimiento había sido del 3,7%, y en los últimos tres meses de 2009 había alcanzado el 5%.

3. El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ha reconocido que la recuperación en EEUU se ha ralentizado.

4. No obstante, Bernanke aseguró recientemente que persisten las condiciones para que vuelva a acelerarse el crecimiento en 2011.

FUENTE : EXPANSION