Los paraísos fiscales custodian alrededor del 25% del PIB mundial

 El Economista.es


Según la OCDE hay alrededor de 50 paraísos fiscales sobre la tierra, estos Estados destacan por aplicar un régimen tributario muy favorable para empresas y ciudadanos no residentes, que normalmente suelen poseer grandes sumas de dinero. Este régimen favorable consiste en una exención total o casi total de los impuestos que se aplican en los Estados con sistemas tributarios comunes.
Según publica el suplemento económico ABC Empresa son casi medio centenar los Estados considerados paraísos fiscales. Las entidades financieras de estos países custodian el 25% del PIB mundial, unos 17,5 billones de euros. Para evaluar mejor esta cantidad, el PIB de España es más o menos de 1,4 billones de dólares.
En la lista de paraísos fiscales que maneja el Gobierno español hay varios Estados dentro de la Unión Europea: Luxemburgo, Chipre y Malta. En esta lista también se encuentras países más pequeños como Liechtenstein, Andorra, Mónaco o San Marino.
Los agentes económicos de España no son una excepción a la hora de usar estos Estados libres de impuestos para extranjeros. En 2011, el 91% de las compañías que cotizan en el Ibex 35 tenían sedes abiertas en paraísos fiscales.
Según estimaciones del sindicato de los técnicos de Hacienda (Gestha) cifra en 175.000 millones de euros la cantidad que los españoles tienen en paraísos fiscales.
Ante estas cifras, el actual Gobierno puso en marcha la conocida amnistía fiscal, que ofreció un impuesto único y lineal del 10% a las personas físicas y jurídicas que declararan el dinero oculto en estos paraísos. Los resultados de la amnistía fueron más que dudosos, Gestha cree que sólo afloró el 6% del dinero oculto.
Aunque la lucha contra estos paraísos fiscales no ha logrado grandes éxitos, si es cierto que desde los atentados del 11-S se puso en marcha una persecución más intensa sobre los defraudadores y se iniciaron conversaciones con las autoridades de estos paraísos para que colaboren en las investigaciones. Y es que, tras el atentado en las Torres Gemelas que se demostró que se habían usado paraísos fiscales con fines terroristas.